Queridos glotones,
Aquí os envío la revisión de una de mis últimas visitas, al restaurante el Cacique, en el Paseo de la Habana de Madrid.
Se trata de un restaurante de cocina mediterránea, cuya especialidad principal son las carnes a la brasa, y que recientemente ha sido objeto de un "restyling" (permitidme utilizar un vocablo que normalmente se aplica más a los coches) para modernizarlo, más por fuera que por dentro, ya que la calidad sigue siendo una de sus principales banderas.
Para empezar a hablar, con las cañitas de rigor mientras que se decide sobre la carta, una tapita de albóndigas caseras, muy ricas, un detalle:
Después, un solo entrante, para dejar sitio a las carnes, de ventresca con tomate pelado y cebollita, sencillo, pero muy acertado en la mezcla de sabores:
Y como platos principales, unas carnes. Ya que éramos 3, nos decidimos por un par de cortes de carne distintos, a saber, un solomillo:
Lo cierto es que las carnes de El Cacique van acompañadas de forma inseparable de un toque argentino, ya que sus carnes, aunque no solo, vienen preparadas con dichos cortes (bife, entraña, etc.), así que su sabor es, sencillamente, espectacular.
Y de postre... tarta de manzana, con helado de vainilla...
Ambos postres riquísimos, aunque si tengo que elegir me quedo con la manzana, al estilo compota, con un toque de canela, muy recomendable, y más con la mezcla del helado de vainilla.
Todo ello, regado con un Viña Mayor de 2009, adecuado para combinar con las carnes.
En general, un restaurante muy recomendable si lo que os apetece es comer una buena carne a la brasa y que con los descuentos varios que se pueden conseguir (nosotros fuimos con el tenedor - 30%) lo convierten en una experiencia asequible - en torno a 35 - 40 euros por persona.
La única nota negativa fue la ubicación. Si tenéis la posibilidad, pedid que os pongan en el piso de arriba, ya que con las cristaleras a la calle ofrece un mejor ambiente que en la planta de abajo.
Que ustedes lo disfruten.
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